Consiste en hacer papel con semillas, que se puede plantar, regar, y al cabo de unos días...¡aparecerán las plantitas!
Los materiales que necesitaremos:
- Semillas de flores
- Papel
- Agua
- Tijeras
- Batidora
- Colador
- Malla fina
- Esponja o cucharón
- Bandeja
- Toalla o paño de cocina
- Papel de cocina
- Molde
Empezaremos cortando trozos de papel blanco y de otro color. Los metemos en la batidora, y echamos agua hasta cubrir los papeles. Batimos bien hasta que quede una pasta. Añadimos las semillas.
Después, echamos esa masa sobre un colador que estará cubierto por la malla fina. Apretaremos muy bien con la esponja o con el cucharón para que escurra bien el agua sobrante.
Una vez hayamos quitado todo el exceso de agua, lo ponemos en la bandeja (o lo metemos en un molde), bandeja que habremos forrado con el paño de cocina. Cuando tengamos la masa bien extendida, pondremos por encima papel de cocina y algo de peso.
Dejaremos secar la masa (si queremos que se seque más rápido, podemos usar un secador de pelo).
Una vez terminado tu papel con semillas, ¡sólo tienes que plantarlo! Para ello, empapa bien el papel y mantenlo en remojo durante 12 horas. Cúbrelo con 1 cm de tierra; tras ésto, humedece la tierra y busca un lugar con buena temperatura y luz. Riégalo todos los días, tener en cuenta que el papel debe estar siempre húmedo. Y ya tan sólo hay que esperar a que germinen (tardarán unos días) y colócalo en una ventana o al aire libre.
Una idea de regalo |
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